Esta serie demuestra como un concepto simple y sin grandes aspiraciones (y haaaarrrto repetido en un millón de paises) puede seguir triunfando. Y entreteniendo. La versión americana me gusta especialmente porque se centra más en convertirla al fomato sit-com típico americano, y menos en el futuro cambio y romance de los protagonistas.
Esta versión está, además, cargada de geniales interpretaciones (Amanda y Mark son súper divertidos) y una red de personajes secundarios que hacen que en cada capítulo no pasen 1 ó 2 cosas, sino 4 ó 5.
También quiero destacar el estilismo de Betty, porque estoy segura de que si miráramos alguno de sus "trajes" lado a lado con algunos de Carrie Bradshaw de "Sexo en Nueva York", tampoco veríamos tantas diferencias. Sólo que la primera está considerada estridente y ridícula, y la segunda como una gurú de la moda y la modernidad (pluma en la cabeza? alguien?).
Casualmente en este capítulo vemos esto un poco, cuando Amanda se muda con Betty (la han desahuciado y está en bancarrota por gastar demasiaaado) y empieza a ponerse su ropa... una camiseta de Betty que ella convierte en vestido (con un cinturón, claro) y lo mejor, cuando recorta los leggings de Betty y se los pone de vestido-mini y bufanda. Genial.
En general la recomiendo, aunque hayais visto todas las versiones anteriores. Es muy divertida.
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